'Show must go on' en la sala Stella

El mundo nocturno de Madrid, de la ciudad gatera, es muy amplio. Siempre ha sido un centro de vida, cultural y social. Una de las míticas salas que ha vivido una larga época de este universo ha sido la sala Stella, un bajo de la calle Arlabán, entre la Puerta del Sol y el Congreso de los Diputados.

Un local con mucho recorrido, era una bolera cuando Alaska, tras la movida madrileña decidió convertirla en una sala de fiestas y conciertos. Ha sufrido multitud de reinvenciones y siempre supo latir al compás de los corazones gatos de esta urbe.


Hasta que el 20 de julio de 2013 cerró tras el desalojo del club Mondo por superar el aforo limitado de 219 personas con más de 800 personas. Después de algo más de cuatro años y un lavado de cara, por dentro y por fuera, Stella abre sus puertas de nuevo para contar muchas más historias de la noche madrileña.

Una reforma muy industrial ha dejado sus muros al aire en busca de la acústica perfecta para albergar todo tipo de fiestas. La inauguración más sonada ha sido la de Muzik, un club de electrónica de calidad para una media de edad bastante amplia (una horquilla de 25 a 40 y más), porque los amantes del buen tecno no tienen edad. Muzik se marcó una primera sesión de tech house con una selección de deejays de mucho carácter, tres mujeres a los mandos: Helena Piti, Anni Frost y Susana Valenti. El siguiente sábado ya tiene nombres propios también: Valentín Huedo (Woomoon), JL Magoya y Nyctophilia.

Cada sábado tendremos en Muzik (Arbalán, 7) una programación inteligente con las mejores propuestas de la escena internacional y nacional. Un epicentro alrededor del cual girarán nuevas tendencias y Old School, digital y vinilo, el punto común... la calidad y las ganas de disfrutar de todo lo bueno de la auténtica cultura de club.